Los intermitentes de los coches puede ser los unos de los dispositivos que menos se usan en los automóviles. Sin embargo, señalizar con los intermitentes la dirección en la que vamos a ir, es una de las acciones más importantes que se hacen cuando conducimos, avisando a los otros conductores de lo que vamos a hacer para que no haya sorpresas desagradables. En muchos casos, puede que ni siquiera veamos el coche que va a realizar un giro o alguna acción, pero con la luz de los intermitentes, podemos ser capaces de verlo incluso en los ángulos muertos. No utilizar los intermitentes son algunas de las causas de accidentes de coches más comunes, y también es causa de muchos de los enfados que ocurren cuando estamos conduciendo.
Para muchos conductores, activar un intermitente es lo más sencillo que se puede hacer: simplemente mueve una pequeña palanca arriba y abajo, haciendo que las luces se activen. Sin embargo, hay una tecnología detrás de estas luces de señalización que damos por sentado. A continuación veremos como funcionan los intermitentes y como los intermitentes se suelen desactivar cuando hemos acabado de hacer un giro.
Echemos primero un vistazo al circuito que podemos ver el gráfico de la parte superior. El circuito de señalización se activa cuando la llave de ignición se pone en marcha. La energía pasa por un panel de fusibles a una linterna termal. Desde ahí se conecta a un mecanismo o soporte que se comunica con el volante. Dependiendo de la posición de este mecanismo, le electricidad se para o es enviada a los señalizadores de la derecha o de la izquierda (incluidas las luces de indicación en el panel de nuestro vehículo). La electricidad fluye a través del filamento de las luces y después va a tierra. Es una forma básica de un circuito de intermitentes, pero puede que te sorprendas de cómo funciona la linterna termal.
La linterna térmica es un pequeño y cilíndrico dispositivo que algunas veces se puede localizar en el panel de fusibles debajo del salpicadero. Es de un coste bajo y funciona de una manera fiable durante años. Contiene unos elementos muy simples, que son: Un contacto eléctrico que conduce la electricidad en el cableado, una pieza en forma de muelle de acero donde e l contacto eléctrico se une, y una resistencia (en forma de cable) enrollada a una pieza más pequeña metálica.
Cuando activas con la palanca algunos de los intermitentes, la linterna térmica se conecta a las bombillas de los intermitentes por medio del conmutador. Esto completa el circuito permitiendo a la corriente que se distribuya. Inicialmente, el muelle metálico no toca el contacto, por lo que lo único que envía energía es la resistencia. La corriente fluye por el cable de la resistencia, calentando la pequeña pieza metálica (también en forma de muelle) y continuando a las luces de los intermitentes. En este punto, la corriente es tan pequeña, que las luces ni si quieren brillarán ligeramente.
Después de menos en un segundo, la pequeña pieza metálica se calienta lo suficiente para expandirse y curvar el muelle metálico más grande. Esto fuerza que el muelle curvado toque el contacto para que la corriente actual fluya a las luces de señalización, sin ser impedido por la resistencia. Casi ninguna corriente pasando por la resistencia, el muelle se enfría rápidamente, volviendo a su estado normal y alejándose del contacto, y por tanto rompiendo el circuito. El ciclo entonces se repite. Esto ocurre en un promedio de una o dos veces por segundo.
A continuación veremos un poco el mecanismo que cancela la señal de girar cuando hemos acabado de realizar el giro. Como ya habrás notado, la mayoría de los coches tienen la función de quitar el intermitente cuando hemos acabado de hacer el giro y volvemos a girar el volante para continuar rectos. La palanca del intermitente también vuelve a su posición original. ¿Cómo lo hace? En el mecanismo del volante (la parte que gira cuando giras el volante a la izquierda o la derecha), hay una rueda con salientes. Hay también cuatro salientes alrededor de la rueda. Cuando la señal de giro está activada, un nivelador de plástico es interpuesto en el camino de estas salientes. Cuando levantas la palanca para señalizar el giro derecho, un muelle rodante se engancha con una saliente manteniendo la palanca es su sitio. Al mismo tiempo, el nivelador de plástico sale al paso de la rueda.
Al mismo tiempo que la rueda continúa rotando en el sentido de las agujas del reloj, los salientes golpean el nivelador de plástico, el cual gira para dejar pasar cada uno de los salientes. Cuando la rueda vuelve a su posición original, la rueda gira al revés empujando el nivelador de plástico en la otra dirección. Esto fuerza que el muelle se libere de su saliente, por lo que la palanca vuelve a su posición centrada.
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